29.1.07

Promesas y hábitos

El 2007 comienza igual que todos los años: haciendo promesas de lo que será el trascurso del año y quebrando con hábitos viejos y amargos. En efecto, la primera ruptura puede ser por fin tener internet de banda ancha: la piratería nunca será igual. Pero también otros hábitos nos han venido molestando y debemos comenzar a jurar lealtad a los nuevos. Reconozco que tuve miedo. No fuí presionado y creí que en definitiva no iba a ir al concierto de Deftones, pero finalmente todo se resolvió y allá estaré, en la boleta barata, con Manuela.

Lo sorprendente es que las promesas de concierto no llevaron a ningún lugar, en cambio, ella que siempre está disponible a mi solucionó, todo en segundos. Me pregunto qué pasará: un gran recuerdo que tengo es el del video de "Digital Bath" que me permitía dormir tranquilo cada vez que lo encontraba. Ahora en vivo tal vez me provea con la tranquilidad que necesito.

En fin. El conflicto serio este comienzo de año ha sido mi lucha con el sueño: de nuevo madrugo (5 a.m.) dos días (hasta tres) y los ojos no dan, la cabeza duele y los pies pesan más de lo normal... espero habituarme pronto, me lo prometo. Mientras tanto, quiero ver Babel a ver qué. Ah y esto no sería lo suficientemente intertexual si yo no reconociera abiertamente que la promesa de diciembre del año pasado fue recuperar el blogg y el hábito que no pude encontrar en enero fue el de escribir en él, por lo que ojalá logre romperlo y seguir adelante...

20.1.07

Thorns

Hace rato quería un disco que hoy tengo: Thorns. Es un super-grupo de black metal. El lider de la banda es Blackthorn (Snorre W. Ruch) y la alineación cuenta con Satyr, Hellhammer y Aldrahn (ahora ex-Dodheimsgard). El disco es del 2000 y suena bien. Para los más freaks del género sería bueno que bajaran (o encontraran si pueden) los dos split-cds entre Emperor y Thorns, tocando cada grupo canciones del otro.

Por ahora descansar. En el2007 vienen tres discos de black que espero resuenen:
-Mayhem: Ab Ordo Chao.
-Dimmu Borgir: In Sorte Diaboli
-DHG: Supervillain Outcast (portada abajo)


16.1.07

2006 en el cine para mi... y en un disco

Recapitulando, el 2006 fue un buen año y aunque ausente de las salas de cine la mayor parte de estos 365 días, quedaron cosas y temas y visiones que atraparon... me atraparon como espectador de múltiples maneras.

En cine hay un top cinco, mediocre y demasiado subjetivo, en el que me baso en el mero hedonismo -por lo que no habrá una explicación/justificación a continuación- del cinematógrafo y dejo atrás pretensiones críticas de años pasados... además me he ido redireccionando al cine estadounidense desde hace ya varios meses:

1. El niño (de los hermanos Dardenne)
2. Los Infiltrados (Martin Scorsese)
3. Match Point (Woody Allen)
4. Piratas del Caribe 2 (Gore Verbinski)
5. Gracias por Fumar (Jason Reitman)

También está el cine colombiano que dejó atrás un buen año para sí mismo y no para sus espectadores. De estas películas dejé de ver:

1. Soñar no cuesta nada (Rodrigo Triana)
2. Karmma (Orlando Pardo)
3. Cuando Rompen las Olas (Riccardo Gabrielli)
4. Dios los Junta y Ellos se Separan (Harold Trompetero)
5. Las Cartas del Gordo (Dago García)

¿Por qué no verlas? ¿No están allí dos de las banderadas de nuestro cine actual (#1 y 2)? Razones particulares: la 1 por que se ve terriblemente aburrida, el tema, las actuaciones, las insinuaciones en tiempos de guerra (aparte de que no sería justo financiar el imperio Triana: en el 2007-2008 vienen como cinco películas nuevas realizadas por el padre y el hijo), la 2 por razones similares, además de que la crítica logró destruirla por mala. No vi la 3 por el trailer: espantoso, algo de sentimentalismo paila, conmovedor y empalagosamente familiar... paso Pacheco. La 4 la quiero ver, la causa ha sido la falta de tiempo y la 5 es de Dago García porque simplemente no se puede ver, punto.

Las películas colombianas que ví:

1. El Trato (Francisco Nordem)
2. El Colombian Dream (Felipe Aljure)
3. Al Final del Espectro (Juan Felipe Orozco)

La 1 es terriblemente mala. Nordem regresa para no ser olvidado: las paupérrimas actuaciones del elenco sirven de excusa para que el espectador no crea por nada del mundo lo histórico contenido enla historia... ah, y ni una imagen del documental real, que lástima. La 2 no me gustó pero la valoro por su generosidad en detalles y chistes que al menos logran desligarse del lastimero colombiano; la temática es común, esperada y por ende, aburria, pero la realización consigue que uno se enamore un poco de las posibilidades a futuro del cine nacional. La 3 consigue que retomemos la línea anterior sobre el futuro... pero las actuaciones son bastantes malas y la necesidad de sobre-explicaciones en el desenlace de la película termina por arruinar el giro de la historia: el final es tan pendajo pero tan necesario en la evolución de este tipo de películas norteamericanas que es apenas comprensible su promiscua compra en Hollywood.

¿Y la música? Tiempo de radicalidades... sólo quisiera destacar un album este año, el resto ha sido un proceso de múltiples actualizaciones:

Junior Boys - So This is Goodbye

8.1.07

Algunas opiniones encontradas

Feliz año para quienes les interese un saludo tal.

Ahora en Bogotá puedo comparar y recordar por qué odio en ciertas ocaciones esta ciudad: las personas en general poseen una rudeza incontrolable, una antipatía que trasciende una simple conversación y duele. El mar está bien... casi todos fueron amables e invitaban al tiempo, pero se regresa (inclusive uno dice que vuelve decsansado, pero nada se gana en el viaje, nada ha cambiado aún). En la flota pensé en mi obsesión por los top 5 y este nuevo año invita a escribir varias listas que espero terminar este mes. Tembién tuve tiempo para retomar ideas, mirar por la ventana y dormir sobre Manuela. Pero sobre todo, la flota fue un espacio de tiempo que se congela, de los pocos momentos que en verdad logro recordar y no se muy bien por que ocurre así.

Estoy haciendo algo que nunca imaginé hacer: bajar los discos de Marilyn Manson posteriores al Antichrist Superstar para darles una oportunidad. El A.S. a mi parecer es simplemente grande y desafortunadamente el éxito de Manson, su rápido ascendo y desaparición del mainstream me produjo siempre un desdén por escucharlo, porque afuera estaban las camisetas grotescas y los niños tenebrosos, porque la música después de todo es un vivencia y el afuera me la arruinó. Por eso ahora la retomo y está bien, bastante bien. Me alegra que así sea. Hablando de música, me parece importante decir que jugué un juego bien extraño: Emogame, el cual espero que mis amigos jueguen para que lo critiquen, se emputen y comenten de nuevo (en esas interminables conversaciones) sobre el emo y bueno, para que yo se la pueda montar a Calderón, por emo.

Sigo construyendo los links del blog y encontré a varias personas que estimos por distintas razones, sus links están allí, perpetrando la idea de que los leo (en algunos casos los miro)... auqnue no siempre les presto atención. Que el lector los visite. Ah, terminando: siete canciones nuevas de Mindless Self Indulgence, gané el poker de ayer, quiero ir a cine ya, tengo hambre, chao.